En la plaza del Pla de las Comedies Rambla núm. 27, estaba el Teatre Primordial, llamado asimismo Casa de las Comedias, construido en tiempos del Baró de Maldà. El teatro lo administraba el Hospital General y los beneficios iban a parar a esta institución. Se construyó en el siglo XVI, en unos terrenos que pertenecían al Centro de salud. Hasta entonces, los espectáculos se habían hecho en las calles y plazas de la ciudad. Las primeras representaciones eran la vida y milagros de los santurrones. Ya antes de representarse, las obras tenían que pasar 3 censuras: la de los inquisidores, la eclesiástica y la del mismo hospital. Pero, ya a mediados del siglo XVIII, el panorama cambió, se representan obras diferentes y también óperas italianas, para las que se contrataban compañías extranjeras, sobre todo venecianas y napolitanas. Esta clase de relaciones suelen ser poco comunes, y se da más que nada en situaciones donde el hombre es percibido con considerablemente más valor que la mujer. Por ejemplo, una mujer podrá acceder a una relación múltiple al tratar con alguien famoso (como un actor) o muy poderoso: considerará que puede tener a casi cualquier mujer, y que está tolerado ser una de las especiales, pues aún eso la va a hacer sentir privilegiada.
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Todos esos esfuerzos comenzaron a dar sus frutos en 2004, el año en que Erika Lust grabó su primer cortometraje, The Good Girl. Ahí, la mujer adquiría ya un papel activo. La protagonista, que se follaba al pizzero, quería dar placer, mas asimismo recibirlo. The Good Girl fue la bomba en la red. Recibió casi un par de millones de visitas. Ese éxito (y el premio recibido por dicho corto en el Festival de Cine Erótico de Barna) fue lo que empujó definitivamente a Lust a lanzarse a la aventura de fundar su productora. Más de manera frecuente de lo que pensamos, no tomamos estas visiones del pasado y el futuro en consideración. De nuevo vamos almacenando, no sañas y resquemores como anteriormente, sino más bien frustraciones de lo que fue y no ha sido. No lo hagan de ser posible, traten de convertir esto en algo positivo, en oportunidades para prosperar y hacer que esa persona que te acompañe mejore contigo es decir todavía mejor para ti. Nuevamente nada de esto tiene garantías, somos seres sobremanera complejos. No obstante siempre y en todo momento existe la oportunidad de hacer las cosas de otro modo. De cumplir sueños en conjunto y de crecer como personas en un ambiente que solo trae plenitud. Kitty, esta esbelta y bellísima brasileira, es de aquellas mujeres que te encantan al verlas y que no puedes dejar de contemplar ni un segundo. Pero además de esto, es la compañera ideal para gozar del placer enorme del sexo, pues es una amante dulce, entregada y apasionada.
Force, justice, amour: aidemoi
Ya hace tiempo conocí a una chica por Internet, creo que fue en el Badoo, una rubia con un cuerpo muy interesante, camuflado en un look de ropa ancha, moderna, podría decir que vestía entre hip hopera y alternativa, pero tenia su punto. Tras charlar unos días, conectamos realmente bien y comentamos de quedar por Madrid para conocernos. Allá nos vemos, hubo muchas bromas y terminamos comiéndonos la boca en Príncipe Pío, cenando algo. Estuvo muy bien, nos reímos mucho y parecía que nos conocíamos de bastante tiempo, nos mandábamos mens ajitos y estábamos ahí de buen royo, tal vez la cosa podía ir a más. Prácticamente todos los sitios web de citas muestran el número de usuarios registrados conectados en un momento dado. Todo cuanto debe hacer es participar para ver en que diferentes momentos del día puede encontrar decenas, cientos e inclusive miles y miles de solteros online tratando de encontrar ese amigo o bien compañero romántico. Asimismo facilitan mucho la penetración del analdigitus, singularmente en el caso de manos curtidas. Y evidentemente son estupendos para mantener la higiene, puesto que si deseamos pasar a otra zona (vaginal, pechos, boca…) sin llenarla de bacterias anales, solo debemos quitarnos el guante. A falta de guante podemos usar un condón.
Dulce y cariñosa apasionada del sexo
La segunda de esas tendencias de lencería que es indispensable tener en cuenta si se quiere estar al día es la de los encajes. Los encajes siempre terminan volviendo al universo de la lencería y de la lencería erótica y ahora están de vuelta. Que tus sostenes luzcan encajes. De esta forma lograrás enseñar una imagen tan sexy como actual. Mi ventaja consiste en que solo sé que el número del paracaidista tenía que ocurrir ahora. El público y la espectadora, hasta ese momento, solo han recibido la información de que yo le he ofrecido las cartas y ella ha escogido el 2 de copas. Para ella nada ha fallado. Si no soy el que se pone nervioso, pierdo el sentido de la responsabilidad para con mi público, me doy por vencido y le explico que algo va mal poniéndome colorado, para ella el espectáculo simplemente está en curso.
Una noche de celebración con los amigos casi siempre trae consigo un exceso en el consumo de alcohol y tabaco. En verdad, en numerosas ocasiones, la idea misma de celebración está íntimamente ligada al consumo desmedido de alcohol y, aunque fumar ya no es tan popular, también de tabaco. Jugar a ser una puta, es una manera a fin de que reclames tu sexualidad, para decidir sobre el placer en tu cuerpo y sostener el control de la situación. Imagínate a ti en este papel ahora, diciéndole a tu muchacho algo como: Si quieres a esta nena, tendrás que ir un cajero por el hecho de que este trasero no es gratis y su respuesta: ¿Quizá tiene precio una hora en el cielo?… Piénsalo, ¿no te sientes un poco excitada?.
Sin embargo, sucede algo más. Cuando estás con tu amigo en el circuito de saltos, llega el momento de saltar. Tú estás en lo algo de un montículo y tienes que dejarte caer por él y al final de la cuesta hay una rampa empinada sobre la que has de saltar. Entonces, ahí, en ese instante, no puedes hacerlo. Tienes temor de caerte, de perder el control, de hacerte daño. En ese instante brota un bloqueo mental debido a tu percepción del peligro. Si la rampa es muy grande y ves a gente saltar y caerse y romperse las piernas entonces es lógico que no saltes, pero si la rampa es pequeña, entonces no deberías por el hecho de que tener temor. Sin embargo, como no has visto a nadie caerse no sabes lo que puede verdaderamente pasar, con lo que tu percepción del peligro distorsiona la realidad y te impide saltar. Lo mismo sucede con respecto a hablar con una chica, intentar besarla, o pedirle que se venga a tu casa. Lo que tú crees es que es va a ser un auténtico desastre y te rechazara. Pero ¿es realmente tan malo o bien solo es una percepción equivocada del riesgo?
